Fórmula “E” en Buenos Aires 2015
La incertidumbre dejo lugar a la adrenalina, y el espectáculo terminó ganándole al escepticismo previo en lo que fue la primera carrera de la Fórmula E llevada a cabo en suelo argentino.
Los autos eléctricos ya están desarrollando su primer campeonato y el escaso sonido de los motores a batería es para los aficionados más tradicionalistas un argumento de peso para sostener su crítica, aunque es muy egoísta quedarse sólo con un concepto tan fácil sin analizar un sinnúmero de cuestiones que esta nueva especialidad propone.
Visitar grandes ciudades del mundo desarrollando todas las carreras en circuitos callejeros es una opción que marca diferencias con otras categorías internacionales porque el público está “encima” de los autos, y los buenos espectáculos que viene entregando hasta aquí la Fórmula E también es otro punto a favor.
El sábado los entrenamientos matinales y la clasificación nos dieron un primer indicio de lo que son capaces de hacer estos coches y de cómo disfrutar de otras cosas. Los casi 200 kilómetros por hora alcanzados en los metros previos a la frenada de la curva 1, el tránsito veloz y preciso en las “Eses”, el “salto” en las chicanas o los cambios de mano, y las maniobras bien ejecutadas, nos sedujeron y mucho. Son rápidos entre los paredones, donde todo se dimensiona de otra forma, y además se puede escuchar perfecto cuando golpea el piso al transitar sobre los pianitos, cómo pasan los cambios, el sonido de las gomas con dibujo, las frenadas exigidas, y los roces o directamente golpes contra los muros. Todo nuevo y atrapante, porque no hay un motor tapándolo y así los “criticados” 80 decibeles se convierten en una saludable posibilidad de descubrir otros aspectos de la competición.
Más tarde la carrera, por diversas circunstancias y un dibujo del circuito que ayudó, fue muy buena. Con sobrepasos por doquier, cuatro punteros y un final abierto hasta la última vuelta.
Dijo Todt que en poco tiempo se sumarán varias terminales automotrices de prestigio mundial. Alain Prost afirmó que se avecina un gran crecimiento, y el máximo dirigente de Fórmula E Holdings Alejandro Agag, consideró que las preocupaciones por la fiabilidad de los coches quedo atrás y que lo que viene será espectacular.
El desarrollo técnico cuando se libere la entrada de los fabricantes de motores para que ya no sean todos Renault, y también haya nuevos fabricantes de baterías, será un fuerte impulso.
Integramos una generación de aficionados a la que siempre atrapó el sonido de un motor. Sobretodo de aquellos que giran a muchas RPM o tienen muchos cilindros. Esto es diferente. Va en otra dirección. Es para generaciones futuras, y no tengo dudas que ese público lo aceptará como algo normal. El mundo cambia, cada vez hay más autos eléctricos o propulsados por hidrógeno, y el automovilismo deportivo comenzó a recorrer ese camino.
Por Pablo Culela
Fuente: campeonesnet
