Autos que no pagan impuesto al lujo
|A fines de abril, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), actualizó los montos del llamado impuesto al lujo para los autos 0km. Tal y como consta en la publicación de las escalas, su vigencia será hasta el próximo 31 de julio de 2024.

Con estas actualizaciones, nuevamente trimestrales, las automotrices tienen un margen un poco más amplio para aumentar sus modelos y evitar incluirlos en este impuesto. Sin embargo, contrario a lo que ocurría en 2023, cuando el topeo y los fuertes aumentos eran moneda corriente, este 2024 se observa desde un congelamiento hasta una retracción de precios.
Cuáles son los autos que no pagan el impuesto al lujo
Ford
El único modelo de la automotriz estadounidense que queda por fuera es el Territory, listado en $35.173.000 para la versión SEL y $36.860.000 para la Titanium, tope de gama.

Toyota
El Corolla Cross, que hace unos meses estrenó restyling, queda por fuera del tributo al publicarse por $33.291.000 (XLI), $35.329.000 (XEI) y $37.488.000 (SEG). Lo sigue el Corolla, sedán que parte en $25.669.000 para la versión XLI y llega a $31.106.000 en la tope de gama (SEG).
Renault
La marca del rombo acostumbra a tener casi todos sus modelos fuera del impuesto interno. En este caso, son los Kwid E-Tech ($29.881.017), Stepway ($26.030.524) y Duster ($29.214.249) los que lo esquivan en todas sus opciones disponibles.
Volkswagen
Ninguna de las versiones del Virtus ingresan al impuesto al lujo al estar listadas por $26.056.500 (MSI), $28.215.200 (Comfortline), $30.470.600 (Highline) y $34.296.350 (Exclusive). Tampoco lo hace el Nivus, cuya versión tope de gama llega a los $33.247.800 ni el T-Cross, que tiene como versión más cara la alternativa Highline a $35.336.000. En cuanto al Taos, únicamente queda fuera del impuesto la entrada de gama, listada en $37.390.904 (Comfortline).
Nissan
De la marca asiática destacan varios modelos, como el Versa, que publica todas sus versiones por fuera del impuesto (arranca en $24.744.400 y llega a $29.697.000); el Sentra, que también esquiva el tributo (va de $33.619.200 y llega a $34.595.000) y toda la gama del Kicks, cuyo precio más alto es de $32.218.400.

Chevrolet
El Tracker supo integrar en varias oportunidades el listado de autos más baratos del mercado. Si bien en este tiempo abandonó ese ranking, sigue por debajo del impuesto interno al listarse por $25.930.900 en su versión de entrada de gama y llegar a $36.600.900 para la versión Premier.
Jeep
Perteneciente al Grupo Stellantis, dos de sus principales SUV tienen algunas versiones fuera del impuesto. El Renegade, por ejemplo, esquiva el tributo en toda su gama (va desde $29.623.000 a $36.000.000) a excepción del Trailhawk, la versión más completa, que sí ingresa dentro del tributo. A su vez, también figura el Compass, que evita el pago del gravamen únicamente en la versión Sport ($37.120.000).

Honda y Jetour
Por un lado, el fabricante japonés vende el ZR-V en su versión LX por $36.990.000, dejándolo fuera del impuesto y el chino hace lo mismo con el X70 con transmisión automática, al ubicarlo en $38.822.000. En algunos casos, cuando los saltos de precio no son demasiado grandes, los vehículos esquivan el gravamen debido a un cálculo interno de cada marca (es por eso que no es lineal y se estima que, aproximadamente, pagan el tributo a partir de los $37,3 millones, pudiendo haber excepciones como esta).
Fuente: lanacion.com